Caral: lo que revela el hallazgo arqueológico peruano del 2016

Hace unos 4.500 años los antiguos peruanos eran conscientes de lo que significaba la igualdad de género y el papel de la mujer más allá del cuidado del hogar.

El hallazgo en Áspero –asentamiento pesquero de la civilización de Caral– de una mujer enterrada de una forma reservada a personajes de alto estrato social demuestra el rol protagónico y la autoridad que tenían ellas en las etapas más tempranas de la historia del país.

Esa noción milenaria de equidad de género le ha valido a este descubrimiento –bautizado como la Dama de los Cuatro Tupus– el reconocimiento de ser uno de los más importantes del 2016, según el listado del Instituto Arqueológico Americano (AIA, por sus siglas en inglés), en el que resaltan también investigaciones hechas en Inglaterra, Grecia y Kenia.

–Bajo desperdicios–

En el distrito de Supe Puerto, en la provincia de Barranca (al norte de Lima), se estableció la ciudad de Áspero en un asentamiento de unas 18 hectáreas. Allí se pueden observar seis edificios públicos piramidales. Sin embargo, antes de que se iniciaran los trabajos de investigación en el 2005, este terreno no era más que un gigantesco vertedero de basura.

“Sacamos más de 8.000 toneladas de basura acumulada en más de 30 años gracias a una asociación estratégica que hicimos con el alcalde de aquel momento”, contó a El Comercio Ruth Shady, directora de la Zona Arqueológica Caral.

La limpieza trajo consigo el desentierro de centros urbanos, instrumentos musicales –algo común en la civilización Caral–, y los restos de tres infantes y un neonato.

–La dama–

La Dama de los Cuatro Tupus hizo su aparición a inicios del 2016, cuando se realizaban las excavaciones alrededor de la Huaca de los Ídolos, uno de los edificios más importantes de Áspero.“No sabíamos que era un personaje importante. Pero el buen estado de conservación del entierro y de los elementos que envolvían a la dama nos daba a entender eso”, explicó a este Diario David Palomino, jefe de la sede Áspero de la Zona Arqueológica Caral.

El cuerpo estaba envuelto con un tejido de fibra de junco, sujetado por soguillas. Fue cubierto con una capa de ceniza. Y en la base se hallaron restos de una ofrenda consistente en un cuenco de calabaza, raíz de camote y semillas de lúcuma y calabaza.

Para Shady, esta ofrenda “quiere decir que la mujer debió haber tenido dentro de la sociedad una posición social probablemente relacionada con la producción agraria”.

Asimismo, la Dama de los Cuatro Tupus tenía cerca del cuello y del hombro 460 cuentas de un collar elaborado con restos de moluscos, así como un dije de spondylus, y cuatro prendedores o tupus, por los cuales fue bautizada.

El cuidado en la forma en la que fue enterrada y las joyas y adornos, especialmente el fabricado con spondylus –propio de aguas ecuatorianas–, así como los tupus –usados por mujeres de prestigio en las sociedades tradicionales–, le dan la seguridad a sus descubridores de que están frente a un personaje de un estatus social alto.“Los hallazgos realizados en la civilización Caral indican que las mujeres cumplían un rol importante. Dentro de la sociedad también había mujeres distinguidas, no solamente los hombres. De repente compartían ciertas funciones importantes dentro del rol político o religioso”, destaca Palomino.

Para Shady, la noción de equidad de género que se ve en Áspero con la Dama de los Cuatro Tupus se repite en otras culturas del país y es parte de nuestra herencia cultural.

«La equidad de género no la estamos asumiendo como herencia cultural. La equidad de género tiene un punto de reflexión, porque no solamente aparece desde la civilización Caral, sino la encontramos en Vichama -el periodo siguiente- y la encontramos en otras partes de país, como en la Dama de Cao (La Libertad), la Dama de Chornancap (Lambayeque) y en la coya Inca», resalta la experta.

— A tener en cuenta —

Objeto de Lujo: El spondylus era un símbolo de posición alta. Era un material bastante preciado. No todas las personas podían acceder a este tipo de material.

Más pruebas: El equipo de Ruth Shady ha encontrado también en otros asentamientos de la civilización Caral estatuillas femeninas esculpidas que tienen adornos y vestidos. Estas serían un símbolo de la importancia de la mujer en aquella época.

Antigüedad: La civilización de Caral apareció hace unos 5.000 años (3000-1800 a. C.). Es la más antigua del Perú y de América.

Fuente: Diario El Comercio

Fecha de publicación: 18/01/2017